¡Buenos días a todos! Bienvenidos un día más al Blog de Kids&Clouds, agencia digital y sistema de gestión para guarderías y colegios. En el post de hoy hablaremos sobre los efectos del uso de las pantallas en los niños menores. Además, daremos algunas recomendaciones sobre cómo hacer un buen uso de las mismas.
¿Por qué evitar el uso de las pantallas en niños?
Los dispositivos electrónicos han supuesto un cambio radical en nuestra forma de vida y el acceso de los niños pequeños a las nuevas tecnologías no tiene frenos. A pesar del impacto negativo que tiene en los niños la exposición a las pantallas, numerosos estudios indican que hasta dos tercios de los niños pasan más tiempo delante de ellas de lo recomendable. Esto es trágico ya que muchos pequeños crecen en un mundo que no es real, sumergidos en dispositivos electrónicos.
La mayoría de los pediatras recomiendan no exponer a los más pequeños antes de los 18 meses de edad. Sin embargo, las encuestas revelan que más de un 90 % de los niños de 1 año ya han utilizado un dispositivo móvil, empezando algunos de ellos incluso a los 4 meses de edad.
Muchos padres aún no son conscientes del perjuicio que tienen los dispositivos electrónicos para sus hijos y la creciente tendencia al uso de ellos asusta a los expertos. Los niños están programados para aprender interactuando con otras personas y no a través de pantallas, por lo que la comunicación con los adultos es crucial para lograr un aprendizaje efectivo y establecer buenas relaciones sociales.
Efectos negativos del uso de pantallas en los niños
Muchos estudios señalan los cuantiosos perjuicios que provocan las horas frente a una pantalla en los niños. Algunos de ellos son:
- Retraso a nivel cognitivo: en funciones ejecutivas, del lenguaje, de la mente y de desarrollo socioemocional. Esto se debe a que ese tiempo que el niño pasa sumergido en las pantallas es restado a la interacción con sus padres, una interacción de vital importancia.
- Mayor obesidad y riesgo cardiovascular: el uso de la tecnología implica sedentarismo y falta de actividad física. Esto es un problema que está aumentando cada día más entre los niños. La obesidad puede llevar a problemas de salud como la diabetes, problemas vasculares y cardíacos.
- Alteraciones del sueño: la mayoría de los padres no supervisan el uso de la tecnología a sus hijos en sus habitaciones. De lo que no están siendo conscientes es de que esto les provoca dificultades a la hora de conciliar el sueño. Algunos estudios indican que la luz azul emitida por los dispositivos podría afectar a la regulación de los ritmos circadianos y un sueño de calidad es vital para un adecuado desarrollo cognitivo y emocional.
- Enfermedad mental: el uso excesivo de dispositivos digitales ha favorecido al aumento de las tasas de depresión y ansiedad infantil, trastorno bipolar, psicosis y otros problemas de conducta infantil.
- Déficit de atención: las nuevas tecnologías contribuyen a la falta de atención, disminuye la concentración y la memoria de los niños. Esto se debe a la gran velocidad con la que se transmiten los contenidos.
- Conductas agresivas: la falta de filtros y las escasas restricciones impuestas en internet y en las redes sociales, hace que los niños estén expuestos a todo tipo de contenidos violentos y agresivos que pueden alterar su conducta. Los niños imitan todo aquello que ven, por lo que es crucial vigilar la navegación de los niños en internet.
- Perjudica la salud ocular
Recomendaciones de uso de las pantallas en niños
Debido a todos los aspectos negativos que tiene el uso de los dispositivos móviles y tablets en nuestros pequeños, es muy importante saber establecer límites. De esta forma, evitaremos que el buen uso que se pueda hacer de las pantallas pase a ser un mal uso. Para establecer estos límites, la ciencia señala que existen determinados factores a tener en cuenta como son la edad del niño, el momento del día en que interacciona con las pantallas, el contenido que consume y el tiempo de uso.
Los expertos aconsejan en bebés de 0 24 meses no tener contacto alguno con la tecnología. El uso en niños de 3 a 5 años debe ser restringido a una hora al día y siempre siguiendo programas educativos de alta calidad. Es recomendable que el adulto interaccione con ellos y le ayude a comprender el contenido. Para niños de 6 años en adelante, se deben establecer límites de tiempo.
Además, es importante no permitir el uso de las pantallas una hora antes de ir a dormir o como estrategia usual para calmar al niño.
¡Hasta aquí el blog de hoy! Esperamos que os haya gustado. Desde Kids&Clouds Agenda Digital estamos volcados en la educación de los más pequeños. Gracias a nuestra Agenda Digital podrás llevar el control de todo el progreso educativo de tu niño. ¡Pruébala y cuéntanos qué tal ha ido!
