Buenos días. Hoy, desde Kids&Clouds, la agenda electrónica para escuelas infantiles, queremos hablaros de una metodología educativa. En esta ocasión, se trata de Flipped Classroom o como se conoce en español Aula Invertida.
La base de esta metodología es que los alumnos preparen las lecciones fuera de clase, e interactúen en el aula para debatir las ideas, apoyándose en las nuevas tecnologías. Para un uso adecuado de esta metodología, la herramienta Tablón de anuncios es esencial. Con ella se puede mantener una comunicación fluida y coordinada entre las familias y escuelas para llevar la misma línea de enseñanza.
¿En qué consiste la metodología Flipped Classroom?
Algunas de las premisas de este modelo educativo son dedicar más tiempo a la resolución de problemas, crear un ambiente de aprendizaje colaborativo en el aula y usar herramientas de seguimiento individual. Este modelo está en auge y tiene diferentes apoyos como el de la red Flipped Learning; una organización sin ánimo de lucro que provee recursos e investigación al aprendizaje flipped; o eventos como el Congreso Europeo Flipped Classroom.
¿Cómo implantar Flipped Classroom?
En primer lugar, las aulas deben estar adaptadas a este tipo de metodología. Su base es que los niños dialoguen, interactúen y resuelvan dudas. Por lo tanto, las clases deben contar con rincones de aprendizajes específicos, espacios para trabajar en grupos reducidos y realizar actividades tipo taller. Las tradicionales aulas preparadas para que los niños escuchen las lecciones magistrales sin dialogar no es el espacio adecuado para esta metodología. Por lo tanto, es una metodología perfecta para los primeros años de escolarización.
Otro de los puntos clave de esta metodología es la tecnología. Los niños se apoyan en material audiovisual como vídeos, podcast o animaciones que podrán visualizar todas las veces que se quiera en casa para comprender la lección.
Beneficios de Flipped Classroom
Este proyecto educativo plantea varias ventajas, tanto para los profesores como para los alumnos.
- Una enseñanza más flexible y personalizada
- Un ambiente de trabajo colaborativo
- Un aumento de la autonomía del alumno
- Participación de las familias
- Actualización y interacción del profesorado
En definitiva, en este modelo el alumno es el pilar básico y el profesor es un guía, un acompañante que lo va observando continuamente, lo ayuda, y lo retroalimenta.
Esperamos que hayáis aprendido algo más sobre esta metodología y que podáis llevarla a cabo en el aula y en casa. Si queréis hacer alguna propuesta o aclarar alguna duda, podéis contactar con nosotros.

